AlevA Crianza es la etiqueta insignia de esta bodega. Un proyecto personal de Eva Fernández con la que rinde homenaje a su padre, el reconocido bodeguero Alejandro Fernández, fallecido en 2021.
“AlevA es un homenaje a mi padre y a todo lo que he aprendido de él desde niña”, afirma Eva. “Mantener vivo su legado significa respetar la tierra, cuidar la viña y vivir el vino”. El proyecto, que combina tradición y carácter propio, comenzó a fraguarse en el año 2009 cuando se plantó el viñedo, (unas 20 hectáreas) en una ladera orientada al noroeste, a 940 metros de altitud, en el término de Páramo de San Martín en San Martín de Rubiales (Burgos). Hoy las cepas de Tempranillo crecen allí en suelos arcillosos-calcáreos con presencia de piedra caliza, la base ideal para elaborar un vino fresco y mineral. Las uvas maduran lenta y equilibradamente, gracias a la orientación del viñedo que suaviza las horas de sol intenso.
